Por qué los paripés… participación se ha convertido en una palabra polisémica:
Entendemos por participar el acto de construir, de forma colectiva, propuestas propias que respondan a las necesidades e intereses de los sujetos, así como la capacidad de incidir en los espacios de decisión relacionados con un grupo social determinado. Participar es tomar parte -y dar parte- de forma activa en los asuntos de interés para cada grupo social.
¡Ejem, ejem! Convocar un concurso, hacer una obra de teatro, es, sin dudarlo, una actividad muy dinámica, pero para que además sea participativa hace falta que la elección de la propia actividad sea del alumnado. Esto suele ser uno de los más clásicos errores a la hora de hablar de participación, confundirlo con “asistencia” (ir) o con “asistencialismo” (dar).